En 1738, Fabri se integra en el elenco reunido en Madrid por el empresario Pieraccini, primera troupe de profesionales italianos que representaron ópera seria. Vemos al cantante de frente con la cabeza girada a su derecha. Destaca en sus rasgos la nariz aguileña. Sobre la cabeza un fez con plumas en los lados. Lleva un corpiño y vestido hasta encima de las rodillas y una capa larga sobre los hombros. Lleva boas altas y una cimitarra colgando del cinturón. Sus brazos caen a lo largo del cuerpo por la parte delantera, con las manos una enfrente de la otra. Arriba a la izquierda se lee “Ballin”.